La localidad almeriense de Adra se vistió de gala el pasado día 18 de enero de 2024 ante más de 600 personas, para rendir homenaje a uno de sus habitantes más ilustres. El Ilmo. Sr. Alcalde, Manuel Cortés, junto con las Dignísimas Autoridades locales, otorgaron el título de Hijo Adoptivo de Adra a José María Gómez Lázaro-Carrasco, Secretario de la Asociación Crecimiento Humano. La distinción fue aprobada por unanimidad, en reconocimiento a una vida dedicada al servicio, la educación y el compromiso social.
En un emotivo discurso, José María expresó su abrumadora gratitud por este inesperado honor. «Jamás hubiese podido yo llegar a pensar que, por cumplir con mi obligación y seguir los dictados de mi corazón y de mi conciencia, me harían merecedor de este enorme e inmerecido título«, compartió con emoción. Destacó su profundo amor por Adra y recordó a quienes le abrieron las puertas del pueblo hace más de 50 años.
En tono reflexivo, Gómez Lázaro-Carrasco rememoró sus primeros días en Adra, mencionando a sus amigos de toda la vida, a quienes considera maestros en el arte de ser abderitano. Describió la esencia de Adra a través de sus sentidos, desde el aroma del mar hasta los olores de la tierra trabajada con esfuerzo y dedicación.
En su discurso, nuestro secretario compartió la influencia de cuatro pilares fundamentales en su vida: Dios, su familia, sus amigos y su trabajo. Rindió homenaje a su madre, una mujer fuerte y valiente, quien le inculcó principios y valores inquebrantables. También expresó su profundo amor por su esposa e hija, destacando la importancia de la familia en su vida.
La contribución de José María a la educación fue evidente en su agradecimiento a colegas, padres y alumnos. Durante más de 35 años, dedicó su vida a la enseñanza y guió a sus alumnos no solo con conocimientos, sino también con valores que, según él, siguen practicando en sus vidas adultas.
El discurso no estuvo exento de reconocimiento a la labor social, una de sus principales ocupaciones, haciendo mención especial a su participación en Cáritas y el Banco de Alimentos. Invitó a la comunidad a colaborar con estas organizaciones y compartió anécdotas que revelan la importancia de la solidaridad.
José María Gómez Lázaro-Carrasco concluyó su discurso con unos versos modificados que reflejan su profundo amor por Adra:
«Soy español y andaluz, por mi cuna.
Tengo la gloria en mis manos,
si además soy abderitano,
pa’ que quiero más fortuna.
Como esta tierra no hay una,
como esta tierra ninguna.»
El reconocimiento de Hijo Adoptivo de Adra a José María Gómez Lázaro-Carrasco no solo celebra una vida de servicio y dedicación, sino que también destaca la importancia de la gratitud, la familia y el compromiso en la construcción de una comunidad fuerte y unida.